Vivir siempre con alegría

“¿Cómo van a ayunar los invitados a una boda, mientras el esposo está con ellos? Mientras está con ellos el esposo, no pueden ayunar. Pero llegará el día en que el esposo les será quitado y entonces sí ayunarán.” (Marcos 2,19-20)

Como cristianas católicas, estamos llamadas a vivir con alegría. Aunque las circunstancias de la vida no siempre permiten que estemos cien por cien felices, todavía podemos tener un gozo interno al saber que el Esposo (Jesús) siempre está con nosotras, como dice en el Evangelio.

 Puede ser que durante esta época nos haga falta un poco de alegría. Ya pasaron las Navidades y el clima sigue frío y nublado en muchas partes. El verano todavía parece muy lejos y quizás no tenemos nada por venir que nos emocione. 

En momentos como estos, las invito a buscar más ocasiones para celebrar. Por ejemplo, hoy día es el cumpleaños de mi segundo hijo, y vamos a celebrar. Mañana es el cumpleaños de mi esposo, y celebraremos de nuevo. También celebramos los aniversarios de bautismo de cada uno y los días de los santos patrones de cada uno. Todos tenemos nombre de santos, a quienes podemos intentar emular sus virtudes, y si no lo tenemos, podemos escoger uno que nos ayude a crecer en la santidad.  

¿Por qué celebramos? Porque Dios es bueno, nos ama, y siempre está con nosotras. Hermanas, le pido a Dios que las llene de un gozo interno que nunca será quitado. 

// Tami Urcia es miembro de una familia católica muy grande. Ella y su esposo Peruano tienen cinco hijos pequeños y viven en Michigan. Durante su juventud, Tami pasó unos años como misionera en México y ha trabajado para la Iglesia casi toda su vida en diferentes capacidades. Ha sido traductora por más de 20 años.