A veces, sí, me siento como las olas del mar. Desafortunadamente, y aunque me da pena decirlo, hay veces en las que, sí, le ruego al Señor, pero poca fe tengo de que me vaya a contestar la oración. A veces sí, a veces, no – así “como las olas del mar, que van y vienen, agitadas por el viento.”
¿Pero qué estoy esperando? Pues si Dios me ha mostrado Su misericordia en muchos momentos de mi vida…¿qué espero…una gran señal? Pues, ten misericordia de mi, Señor, en esos momentos de duda, de debilidad.
No necesitamos todo eso de Dios. Necesitamos de Su amor, Su paz, Su misericordia. Y cuando pasamos por momentos difíciles – pruebas, tentaciones – que no tengamos duda de que nos ayudará el Señor. Él sí es generoso y bondadoso, y nos dará siempre lo que necesitamos.
Señor, te pedimos este día una fe profunda en Ti, en Tu poder, en Tu misericordia. Que tomemos las pruebas como Jesús tomó la cruz, ofreciéndose a Ti, para que de esas pruebas, vendrán frutos a nuestras vidas – para así vivir hasta más cerca de Ti. Gracias, Señor Dios, por Tu amor, Tu generosidad, Tu paz. Te amamos y Te adoramos siempre.
Amén.
// Jacqueline Sevier es esposa, hija amada de Dios, y futura mamá. Vive en Tyrone, GA con su esposo y están esperando con mucha emoción a su primer bebe el año que viene. Aunque creció en escuelas católicas, no fue hasta finales de su tiempo en universidad que tuvo una conversión de corazón, y empezó a redirigir su vida hacia Dios. Es cantante y canta en el coro de su parroquia, donde conoció a su esposo. Ha aprendido mucho de la comunidad hispana de su parroquia, que apenas empezó a conocer cuando conoció a su esposo. En su tiempo libre, le gusta sentarse en un café tomándose un cafecito, cocinar con su esposo, comer tacos, y cantar (siempre).