“En el Señor confío y nada temo” (Salmo 55, 5bc)
¡Tenemos un Dios de Resurrección! Nosotras vivimos muchos momentos de “triduo” en nuestras vidas: momentos de traición, sufrimiento, muerte, espera y resurrección. Nuestras vidas reflejan el triduo pascual de Jesús. A veces las etapas se sienten muy distintas unas de otras; sentimos que vivimos en un constante ciclo de “triduo”. Otras veces, sentimos que nos quedamos por mucho tiempo en solo una etapa—en un periodo de sufrimiento y desolación que no termina o un periodo de alegría y consolación que no queremos que termine. ¿En cuál nos entregamos al Señor? ¿No podríamos siempre confiar en Él?
En la primera lectura, David está en peligro de la muerte a causa de la envidia de Saúl, pero Dios lo protege. ¡Cuántas veces he pasado penas y ansiedades en situaciones donde Dios me protegía con Su Mano! Él nos invita a no tener miedo. Que sea el salmo responsorial nuestro lema este año: “En el Señor confío y nada temo” (Salmo 55, 5bc).
Escuché la canción de Damascus Worship llamada “Death Into Life” (he traducido un trozo, abajo). Las invito a que escuchen la canción completa en inglés. Me encanta su letra:
“Toda gloria al Dios de la Resurrección
Toda gloria al que ganó la batalla por mi corazón
Toda gloria al Rey de toda la Creación
Jesucristo
Quién me trajo de la muerte a la vida”
(“Death Into Life” de Damascus Worship y Christian Quilon)
¡Me encanta porque así es! Como en el caso de David, nosotras tenemos a Dios quien nos acompaña y nos sana en momentos de muerte y quien nos llena de gracia y misericordia en momentos de vida.
// Alexandra Geigel vive en el norte de Virginia y tiene padres de Guatemala y Puerto Rico. Estudia español en la universidad y es líder de un grupo de estudio bíblico para mujeres universitarias. Le encanta leer la biblia, escribir historias y tocar su ukelele. Lo más importante para ella es su fe católica y quiere que todas las personas conozcan el Corazón de Jesús a través de una relación personal con Él y devoción a la Eucaristía.